Home/Comprometer/Article

Jul 26, 2024 111 0 Padre Augustine Wetta O.S.B, EUA
Comprometer

Abre tu invitación

¿Sabías que todos hemos sido invitados al mayor banquete de la historia de la humanidad?

Hace unos años leía con mis alumnos la historia del nacimiento de Dioniso. Perséfone, cuenta la leyenda, fue preñada por Zeus y entonces ella pidió verlo en su verdadera forma. Pero una criatura finita no puede mirar a un ser eterno y vivir. Así que la mera visión de Zeus hizo que Perséfone estallara, allí mismo, en el acto. Uno de mis alumnos me preguntó por qué no explotamos cuando recibimos la Eucaristía. Le dije que no lo sabía, pero que no estaba de más estar preparados.

El enfoque

Todos los días, y en todas las iglesias católicas del mundo, se produce un gran milagro, el mayor milagro de la historia del mundo: el creador del universo se encarna en el altar, y se nos invita a acercarnos a ese altar para tomarlo en nuestras manos… si nos atrevemos. Hay quienes sostienen -y de forma convincente- que no deberíamos atrevernos a acercarnos y tomar la Eucaristía como si fuera una entrada de cine o un pedido de auto-servicio. Hay otros que argumentan, también de forma convincente, que la mano humana es un trono digno para un Rey tan humilde. Sea como sea, debemos estar preparados.

En 2018 visité la Torre de Londres con mi familia. Hicimos cola durante una hora y media para ver las joyas de la corona. ¡Una hora y media! Primero, nos dieron las entradas; después, vimos un vídeo documental; poco después, nos condujeron a través de una serie de pasillos de terciopelo y cuerdas, entre vasijas de plata y oro, armaduras, lujosos y costosos trajes de piel, satén, terciopelo y oro tejido… hasta que, por fin, pudimos echar un breve vistazo a la corona a través de un cristal a prueba de balas y por encima de los hombros de guardias fuertemente armados. Todo eso sólo para ver la corona de la Reina.

Hay algo infinitamente más precioso en cada misa católica. 

Deberíamos estar preparados. 

Deberíamos estar temblando. 

Turbas de cristianos deberían estar luchando por ver este milagro. 

Entonces, ¿dónde está todo el mundo?

Durante la pandemia, cuando se cerraron las puertas de la Iglesia a los fieles, y se nos prohibió -bueno, se les prohibió- presenciar este milagro en persona, ¿cuántos suplicaron a la Iglesia que tuviera el valor de confiar en que preferiríamos morir, antes que privarnos de este milagro? (No me malinterpreten. No culpo a la Iglesia por esta decisión que se basó en los mejores consejos médicos). 

No recuerdo haber oído hablar de ninguna indignación; pero en aquel entonces, yo estaba ocupado, escondido en el claustro, esterilizando encimeras y pomos de puertas. 

¿Qué darías por haber estado allí en Caná cuando Jesús obró su primer milagro, en presencia de la Reina del Cielo? ¿Qué darías por haber estado allí aquella primera noche de Jueves Santo? ¿O haber estado al pie de la Cruz?  

Tú puedes hacerlo. Has sido invitado. Sé consciente y prepárate.

Share:

Padre Augustine Wetta O.S.B

Padre Augustine Wetta O.S.B es un monje benedictino que sirve como capellán de la Escuela del Priorato de San Luis. Es autor de “La octava flecha” y “Reglas de humildad”. El padre Augustine vive en la abadía de Saint Louis, en Saint Louis, Missouri.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Latest Articles